sábado, 1 de abril de 2017

Los muy mayores (poesía I y II)

En esta tercera entrada de abril, seguimos con la atención puesta en la figura de los adultos mayores. Ahora es momento de cederle la palabra a la poesía. Les presento a los dos integrantes líricos del cuarteto literario que seleccioné para celebrar el otoño: Júbilo y El idioma secreto. El primer libro trabaja sobre una forma antigua –el romance–, mientras que el segundo va por el camino del verso libre. Son maneras muy distintas de abordar la palabra poética, pero cada una guarda su potencia.  







 Júbilo. Romance del jardinero


Un romance es una forma poética con características fijas. Tal vez a fuerza de machacar, muchos puedan recitar la «definición»: tirada indefinida de versos octosílabos con rima asonante en los pares. Eso. Quizás también recuerden que ha sido vehículo de grandes hazañas, puesto que se presta muy bien para la poesía narrativa.

Todo relato épico demanda un héroe. Para nosotros será don Juvenal, un experimentado jardinero que vive la crisis de la jubilación forzada. La historia está dividida en cuatro cantos que sucesivamente se encargan de plantear el conflicto, la caída del héroe, la empatía de la naturaleza y la reaparición de la infancia como fuerza vital.

El recurso a la forma tradicional del romance va de la mano con el uso del «tú» poético. Pero esa segunda persona de resonancias arcaicas para la variedad del castellano rioplatense convive con juegos de palabras y expresiones retóricas que le dan mucho ritmo al poema.

El componente lúdico es importante y ayuda a construir el sentido celebratorio del romance. Aparece tanto en el uso del lenguaje (por ejemplo, mediante la paranomasia júbilo/jubiló que constituye la médula del poema) como a nivel de la historia (en particular, gracias al tropo de la prosopopeya que inviste de personalidad a la naturaleza y sostiene al personaje de la Infancia).

Así empieza la peripecia del jardinero:

«Del jardín no se jubila.
Juvenal sí jubiló,
es decir, lo jubilaron.
¿Es posible, digo yo,
jubilar a un jardinero,
a un poeta, a un pintor?».



Ficha

Título: Júbilo. Romance del jardinero
Autora del texto y de las ilustraciones: Andrea Pizarro Clemo
Lugar: Buenos Aires
Editorial: Limonero
Año: 2016



El idioma secreto


La poesía de María José Ferrada me llegó gracias a un encuentro que coordinó Marcela Carranza en la biblioteca Juanito Laguna. Al decir que me llegó, no solo me refiero a que tuve acceso al texto, sino que hago referencia a ese momento en el que un material literario toca algo interior y lo transforma. ¿Quieren probar?




«El idioma secreto me lo enseñó mi abuela.
Y es un idioma que nombra las plantas de tomate, la harina, los botones.
Un día me llamó.
Me dijo que antes de que la muerte se la llevara quería entregarme algo.
Mi herencia era una caja de galletas con ovillos de lana y boletas de ferretería.
Ahí dentro estaban las palabras.

Y con ellas
hice mi habitación en el mundo».


El idioma secreto trabaja con el tópico del legado. La figura de la abuela se recupera a través de un fluir rememorativo en el que el yo poético va articulando un idioma construido con palabras que maduraron en la intimidad del vínculo afectivo, pero que se expresan desde el presente…  La memoria se construye siempre desde la posterioridad. Los versos libres –que a veces se acercan a la prosa poética– sugieren el devenir difuso e irregular de una evocación donde caben la maravilla, la fantasía y la distancia.

Leer el poemario produce un asombro contradictorio. Identificamos una manera muy personal de decir el mundo, al tiempo que nos sentimos parte de la forma poética. En El idioma secreto es posible reconocer un sustrato de saberes de la cultura popular interiorizados, procesados por la subjetividad del yo poético. Pero esa subjetivación de lo social se fragua en una forma artística que le da generalidad. Recuerdo haber leído a Jorge Monteleone cuando recuperaba los planteos de Theodor Adorno: la palabra poética recibe una doble exigencia porque, por un lado, se espera que exprese la máxima individuación de la experiencia social; y por el otro, requiere un grado de universalidad que le permita transformarse en una expresión artística. Viene a cuento, ¿verdad?



Fuente mencionada

Monteleone, Jorge, «Gelman: El salario del impío», en Orbis Tertius, 4(8), 2001. [En línea]. Disponible en: http://www.fuentesmemoria.fahce.unlp.edu.ar/art_revistas/pr.2926/pr.2926.pdf


Ficha

Título: El idioma secreto
Autora: María José Ferrada
Ilustraciones: Zuzanna Celej
Lugar: Pontevedra
Editorial: Kalandraka
Año: 2014


Entradas relacionadas






No hay comentarios: